viernes, 12 de diciembre de 2008

URETERES


Trauma Ureteral


La lesión ureteral es rara y suele ocurrir en las heridas penetrantes por arma blanca o de fuego. Mucho menos frecuentes son las lesiones ureterales por trauma contuso. En éstos casos la hematuria puede estar ausente en un 30% de los casos. La clínica es inespecífica en etapas tempranas, y en forma tardía se manifiesta como ileo prolongado, extravasación urinaria, obstrucción urinaria, anuria y sepsisLas lesiones ureterales no producen alteraciones hemodinámicas inmediatas, por lo que la indicación de laparotomía está determinada por las lesiones asociadas, por lo que habitualmente es un hallazgo intraoperatorio por el estudio con pielografía indicada en ese momento también pueden ser una hallazgo del estudio de una hematuria.-Manejo Pacientes que requieren laparotomía por lesiones asociadas


Si el uréter está seccionado o la perdida es pequeña, permitiendo una reparación sin tensión se debe realizar una anastomosis termino terminal en forma espatulada, con material reabsorbible, instalación de catéter interno y drenaje retroperitoneal.Si hay una pérdida amplia de uréter (no permitiendo una anastomosis), se realiza una derivación interna o externa para -en un segundo tiempo- realizar por el especialista una reparación definitiva.


Las alternativas de manejo inicial están determinadas por el segmento ureteral afectado.
Ureter bajo: neoimplante vesical con vejiga psoica (para disminuir la tensión)
Ureter medio: ureterostomía cutánea
Uréter alto: ureterostomía cutánea o nefrostomíaSi no presenta lesiones que requieran laparotomíaSi es posible: traslado a un servicio de urología para la instalación de catéter doble jota vía endoscópica o reconstrucción ureteral según las características de la lesión.

Si no es posible el traslado: cirugía reparadora del uréter con derivación interna o ureterostomía cutánea con abordaje retroperitoneal.En caso de que la lesión sea diagnosticada en período tardío o con complicaciones importantes que conducirán a una reconstrucción inmediata poco satisfactoria: nefrostomía convencional o transcutánea
Trauma Escrotal


Las laceraciones superficiales sólo requieren debridación y sutura.Las contusiones pueden provocar hematoma local y equimosis, y el manejo es conservador sintomático, con analgésicos y suspensión escrotal. Se debe descartar la rotura testicular.En las avulsiones del escroto, en que los testículos y los cordones espermáticos están intactos, se debe realizar un debridamiento quirúrgico, lavado con suero fisiológico y vacuna antitetánica, para luego proteger los testículos colocándolo en los tejidos subcutáneos de los muslos. La reconstrucción tardía puede efectuarse con un injerto de piel o un colgajo de muslo.


Trauma Testicular
La contusión de los testículos causa dolor intenso y, a menudo, náuseas y vómitos.Los testículos pueden estar rodeados por un hematoma, lo que hace difícil evaluar sus bordes. Para definir la rotura testicular, se utiliza la ecografía; si se confirma la rotura, se debe reparar quirúrgicamente suturando la albugínea con material irreabsorbible.


Trauma Peneano
La lesión más frecuente es la rotura parcial de los cuerpos cavernosos por falsa maniobra de coito; se presenta con dolor y hematoma. Se debe instaurar tratamiento quirúrgico de inmediato, suturando la túnica albugínea, con material irreabsorbible.La avulsión de la piel del pene suele ocurrir por accidentes laborales con maquinaria. Se debe realizar aseo, debridamiento, vacuna antitetánica, y se realiza injerto de piel en forma diferida.La amputación de pene es excepcional. Se deben debridar los bordes, cerrar los cuerpos cavernosos y realizar una uretroplastía.En las lesiones peneanas en que se sospecha un posible daño uretral, se debe realizar una uretrografía.

URETRA


Trauma Uretral


Las lesiones de uretra son poco frecuentes y ocurren más a menudo en los varones. Por lo general son la consecuencia de un traumatismo contuso asociado a fracturas pélvicas o con caída a horcajadas. Son raras en las mujeres. Las heridas penetrantes por arma blanca o de fuego son infrecuentes. La uretra puede ser lacerada, cortada en dirección transversal o sufrir traumatismos contusos.

La uretra se divide en dos porciones: a) la uretra posterior, que consta de una porción prostática y una membranosa; b) y la uretra anterior, que consta de una porción bulbar y una pendular.


El manejo está determinado al grado de lesión y el segmento lesionado.Clasificación de Corriere
Tipo I: estenosis uretra posterior (Colapinto y McCallum tipo I).
Tipo II: dislaceración de la uretra membranosa por sobre el diafragma urogenital, parcial o completa (Colapinto y McCallum tipo II).
Tipo III: lesión de uretra combinada (anterior y posterior) parcial o completa, con disrupción del diafragma urogenital (Colapinto y McCallun tipo III).
Tipo IV: lesión del cuello vesical con extensión a la uretra.
Tipo V: lesión de la uretra anterior pura, ya sea parcial o completa.
ManejoSi el paciente presenta shock por hemorragias de la pelvis o periné, el primer tiempo va estar orientado a la resucitación hemodinámica del paciente. Esta complicación es frecuente en las fracturas de pelvis, ya que estas pueden llevar a sangrados cuantiosos, requiriendo aporte de volumen y estabilización de la fractura. Tan pronto el paciente se ha recuperado del shock hipovolémico, se procede a manejar el trauma uretral. Uretra anterior Tipo V, sean parciales o completas: drenaje vesical por cistostomía suprapúbica. Posteriormente se derivarán a urología para estudio diferido y manejo con ureterotomía interna o uretroplastía según corresponda.Uretra posteriorLesiones tipo II y III, sólo requieren cistostomía suprapúbica. Posteriormente se derivarán a urología para reestudio diferido en dos a tres semanas.En el caso de las lesiones parciales, la mayoría de ellas mejora sin ninguna terapia, y en el caso de las totales, habitualmente requieren procedimientos terapéuticos (uretrotomía interna o uretroplastía).Lesiones tipo IV, con lesión vesical asociada a la uretral y, en los casos en que se ha requerido exploración abdominal, por lesión de otros órganos pélvicos: realineación inmediata de la uretra e instalación de sonda uretrovesical con la técnica de “carrito”. Posteriormente, se deriva a urología para seguimiento y manejo diferido.

TRAUMA VESICAL

Trauma Vesical


Las lesiones vesicales por traumatismo son las más frecuentes y se asocian generalmente a fractura de pelvis. La lesión también puede ser provocada por arma de fuego o blanca. La hematuria es un signo que se encuentra en todos los pacientes con ruptura vesical.Las lesiones vesicales se clasifican en intraperitoneales y preperitoneales. La cistografía es el método que permite diferenciar ambas entidades.Intraperitoneales: reparación quirúrgica y derivación con sonda con sutura absorbible corrida en dos planos.Preperitoneales: derivación con sonda uretrovesical o catéter vesical suprapúbico por diez días. Si, por otras razones, se explora el pacientes, se podrá realizar la reparación en el mismo tiempo.

miércoles, 10 de diciembre de 2008

TELEDIAGNOSTICO




Los diagnósticos a distancia es un campo en el cual se pueden ahorrar recursos, tanto humanos como tecnológicos. Esto de es de gran apoyo, ya que con una buena distribución de estos recursos, se va a poder cubrir con mayor eficacia la demanda de consultas.

El telediagnóstico, así como puede llegar a ser de útil, si se llegara a tener algún tipo de falla, o no se llegara a tener bien definido y probado el sistema, podría ser muy peligroso, ya que con cualquier falla a la hora de la transmisión del diagnóstico, se podría dar el caso de que este fuera erróneo, causando un daño a la persona que lo solicito; por lo que los medios de comunicación usados tienen que ser seguros y confiables.

Éste método de diagnósticos a distancia, no es forzosamente utilizado para pedir diagnósticos de un lugar muy lejano a otro, aunque si es una buen uso de ella; sino que también es utilizado por ejemplo por la ambulancias para mandar los síntomas de los pacientes que van en camino hacia los Hospitales para que cuando este paciente llegue, ya este listo todo para atenderlos y se les atienda con mayor rapidez y confiabilidad.